MIGAS DE MI YAYA

Que buenas están las migas, me encantan desde pequeña, debe ser porque me despertaba con el olorcito a pimentón y me encontraba a mi abuela en la cocina con su cuchara meneando las migas y dejando fuera las blancas, “porque esas son como feinas y se dejan fuera” y a mí me daba lo mismo yo me las comía mientras se hacia el chocolate.

Porque en mi casa las migas se toman para desayunar y con chocolate puede resultar extraño pero es así, sin huevo, sin chorizo, sin uvas…. Migas viudas solo pan, eso sí si tú luego quieres puedes ponerle más cosas, mi marido tiene que acompañarlas mínimo de un huevo frito.

El truco para que estén ricas, es que tienen que estar sequitas y un pelín crujientes y para eso hay que poner poquita agua, siempre tenemos tiempo de ir añadiendo en caso que no lo pida y menearlas mucho para que se reparta bien el calor y queden todas igualitas.

Espero que os guste.

Ingredientes:

1 barra de pan del día anterior

4 dientes de ajo pelados

4 cucharadas soperas de aceite de oliva

1 cucharadita de pimentón dulce

Sal

Agua

Preparación:

Primero tenemos que picar las migas, se puede hacer a mano con un cuchillo, si tenemos la Thermomix ponemos el pan troceado en el vaso y programamos unos segundos a vel 5. También las podemos picar en una batidora de vaso americano. 

Una vez que tengamos las migas picadas reservamos.

En una sartén honda calentamos el aceite y freímos los ajos con cuidado de que no se quemen. Una vez que estén bien doraditos los ajos añadimos el pimentón. Apartamos del fuego para que no se queme.

A continuación añadimos el agua y la sal. La cantidad de agua a ojo, más bien poca yo añado como dos dedos.

Llevamos a ebullición y añadimos el pan. Y ahora empieza lo bueno con una cuchara (yo la prefiero de metal) empezamos a revolver y a menear a fuego medio y venga a remover de abajo hacia arriba para que se mezcle todo bien y vayan cogiendo colorcito. Según las vamos preparando (esto es a ojo) vamos viendo cómo van nuestras migas, si vemos que están muy, muy secas añadimos una poquitina de agua y seguimos removiendo hasta que obtengamos una miga suelta, crujiente y rojita.

Ya tenemos listas las migas ahora solo queda tomarlas acompañadas de una buena taza de chocolate caliente o si os gusta más con su huevito y complementos.